En SMARMEC definimos la gestión logística de forma individualizada para cada proyecto
Trabajamos con todo tipo de incoterms y contamos con el apoyo de agentes logísticos nacionales e internacionales
La fase de gestión logística, última de las fases en las que se dividen los proyectos en SMARMEC, es aquella en la que se define la gestión estratégica de los aprovisionamientos y de los elementos fabricados. Se trata del paso final que concluye todo el conjunto de tareas desarrolladas en las siete fases anteriores. ¿Cuentas ya con una idea para la elaboración de una máquina inteligente pero no sabes cómo llevarla a cabo? ¡Ponte en contacto con nosotros y te ayudaremos!
En esta fase se ejecuta la definición del plan teórico realizado en la fase 5. Cuanto mejor y más detallado sea este, más probabilidades de éxito genera. Para garantizar una excelente gestión logística, en Smarmec, contamos con equipos en cada localización para dirigir toda la estrategia, tanto de suministros como de soluciones ya fabricadas. El objetivo es obtener el mejor precio para el proyecto global y que el cliente pueda disponer del producto en los momentos y en las cantidades que su mercado requiera.
En Smarmec trabajamos con todo tipo de incoterms (términos y requisitos de una operación de compraventa internacional) y contamos, a su vez, con el apoyo de agentes logísticos tanto nacionales como internacionales para cada localización. Nuestro equipo de logística es el encargado de ejecutar el plan anteriormente definido y de implementar los cambios para una mejora continua del proceso. El equipo de aprovisionamientos del cliente es quien evalúa el servicio y el que transfiere los cambios de las necesidades en el mercado objetivo.
Es decir, el cliente es el que marca las necesidades del mercado y, por tanto, quien establece la base para una buena definición de requerimientos logísticos: cada cuánto, en qué cantidad y dónde se consume un producto.
Una gestión óptima de la logística depende, en gran medida, de lo planificado en las fases anteriores:
- Dónde y cuándo se compra.
- Dónde, cuánto y cómo se fabrica.
- Fiabilidad de la producción.
- Acierto con la variabilidad de la demanda.
- Etc.
Si las fases anteriores no están bien ejecutadas y planificadas, la gestión logística puede significar un sobrecoste inesperado importante. Además, cada producto, cliente y mercado tiene unos requerimientos específicos y por ello es necesario definir toda la cadena logística de forma individualizada para cada proyecto.
Caso de éxito
Contar con diversas localizaciones y experiencia internacional nos permite dar soluciones logísticas creativas, como es el caso del servicio que realizamos para nuestro cliente HP. Conseguimos optimizar el coste de los aranceles en EEUU tras la última subida de estos a los productos chinos. Para ello, decidimos cambiar la cadena logística de los productos inicialmente fabricados y vendidos desde China a EEUU en un tiempo mínimo. De esta manera, su fabricación continuaba teniendo inicio en China, sin embargo, se finalizaba en nuestra fábrica de Malasia para entregarse desde allí a EEUU, lo que significó un gran ahorro en todo el proceso.